Tras 3 clásicos, y sin entrar en un análisis profundo de lo no futbolístico, cabe destacar la pérdida de papeles y de valores deportivos que han traido consigo estos enfrentamientos. Detalles indignos, inmorales y deshonrosos para un juego, como lo es el futbol no lo olvidemos, que últimamente carece del famoso fairplay que debe prevalecer en todo acontecimiento deportivo.
El todo vale y a cualquier precio tiene que terminar, porque el futbol, sobre todo el que realiza o intenta realizar el barcelona, debe estar por encima de cualquier intento de desestabilizar las buenas maneras, el respeto y la honestidad.
Pero dejando de lado lo que no es futbol (recuerdo que los programas más consumidos por la masa social son los polémicos y salpicados de rosa) y que se esta adueñando de nuestro deporte, me adentraré con pinceladas y detalles tácticas cogidas y apuntadas para intentar explicar circunstacias de juego y de competición, salientes de las habituales que todos observamos. Porque los mortales también apuntamos cosas para aprender y mejorar.
1º clásico, partido de liga: cariño sin roce. No destacaría nada, porque nadie quiso hacer nada, ni desvelar futuros planes, ni tacticas venideras en partidos más transcendentes.
2º clásico, partido de copa: roce con cariño. Fué un partido donde la intensidad y la concentración, superaron a la ansiedad y la tensión. Un equipo manejo los tempos anímicos con solvencia, y otro no pudo controlarlos. Las pérdidas de Piqué en conducciones y pérdidas de balón hacia la cueva presionante madrileña, son artifices de las 2 mejores ocasiones del madrid, Pepe y Cristiano. Pepe realiza un marcaje individual al jugador que intenta crear el juego en campo propio barcelonista. Poca amplitud y circulación de balón en la elaboración del barça. El balón parado madridista crea peligro, el del barça no sirve para nada, de lo que el madrid se aprovecha para crear peligrosas contras. El acierto de Mascherano como central, para dejar la creación del juego blaugrana en Busquets. En el 2º tiempo, el cambio de Guardiola cargando el juego por la derecha, con villa centrado, un acierto. El GOL de Cristiano, viene precedido de la pérdida de messi en acción individual en zona de peligro de medio campo, con la extraordinaria pared de marcelo, excelente centro y magnífico remate finales. Jugar con un central los últimos minutos contagia de precipitación al equipo.
3º clásico, ida Champions: roce sin cariño. y se desató la madre de las batallas. Hubo de todo, intensidad y tensión excesivas, se notaba que se jugaban más que un partido. Lucha y contrastes de ideas, tanto deportivas como extradeportivas. Tácticamente, el barcelona contrarrestó la peligrosidad del contraataque madridista con un cambio de sistema (14231) y una presión intensa y axfisiante tras pérdida de balón. Villa se volcó a la espalda de marcelo, con pedro en el otro extremo, consiguiendo la amplitud deseada para dejar espacios libres a Xavi. El Barcelona no se queda atrás y entra en el juego de pedir cuando le dan. El duelo estelar, por lo intenso e igualado, lo protagonizaron Dimaria y Alves, con clara ventaja para el argentino. Pepe juega con fuego en demasiadas ocasiones y al final acaba quemándose. El juego directo al que tuvo que recurrir el madrid por la buena presión barcelonista (sobre Adebayor y Cristiano). Los saques rápidos en las faltas, sobre todo de Xabi Alonso, hacen daño a la espalda culé. Marcelo se desborda en exceso por dentro para dejar espacio por fuera.
Demasiado, porque hubo demasiado que analizar. Para los entrenadores, un gustazo ver y analizar todo lo ocurrido, espero que sucesivas veces, también el futbol gane en todos los aspectos
saludos
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